Una auxiliar de vuelo se mete en la cabina para avisarle al piloto que una pareja tiene una nueva bebé a bordo

Nov 26, 2021 by apost team

En la medianoche del 9 de noviembre de 2020, Dustin y Caren Moore volaban a su casa en California desde Colorado, Estados Unidos. Llevaban con ellos a una bebecita, pero de repente sucedió lo inesperado. La pequeña, que apenas tenía ocho días de nacida, empezó a llorar como lo hacen todos los recién nacidos. Como no querían molestar a los demás pasajeros, la pareja le preguntó a la azafata de Southwest Airlines dónde podían cambiarle el pañal a la angustiada bebé.

Jenny, la azafata, les mostró un lugar en la parte trasera del avión y les hizo algunas preguntas causales. La chica tenía mucha curiosidad por saber por qué Dustin y Caren estaban viajando con una bebé tan pequeña. La pareja les contó que acababan de adoptar a la niña, tras pasar diez años tratando de concebir. Ya habían agotado todas las opciones posibles de fertilidad asistida, sin ningún éxito.

Después del cambio de pañales, los Moore volvieron a sus asientos, aliviados al ver que su bebé dormía plácidamente. Habían pasado una semana muy agotadora, viajando y completando formularios. ¡Pero finalmente estaban camino a casa con su nueva hija! Aunque estaban nerviosos y estresados, también estaban muy entusiasmados por empezar su nueva vida juntos. Unos minutos después, otra azafata se les acercó y felicitó a la feliz pareja por la exitosa adopción. Después, la azafata anunció por el intercomunicador del avión que tenían un invitado especial a bordo. La celebración colectiva que se produjo fue algo que los Moore nunca van a olvidar.

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Según The Washington Post, fue un auxiliar de vuelo llamado Bobby el encargado de darles a Dustin y Caren Moore, de 33 y 35 años respectivamente, la sorpresa de sus vidas. Mediante un hilo de Twitter, Dustin explicó lo que ocurrió en el vuelo de Southwest Airlines:

"Jenny y otro pasajero felicitaron a mi preciosa hija, y preguntaron amablemente qué nos había motivado a tomar un vuelo con una bebé tan pequeña. Les conté la historia de la adopción por encima, y se apresuraron a felicitarme".

En una entrevista con The Washington Post, Dustin explicó con detalle lo que Bobby anunció por el intercomunicador del avión

"Cinco minutos después, la voz de Bobby resonó por el intercomunicador, diciendo: 'Señoras y señores, hoy tenemos una invitada muy especial en este vuelo. Solo tiene ocho días de edad, y está viajando a su casa con su madre y su padre'”.

Al principio, la pareja se sintió confundida por el interés del personal en su hija recién nacida. Sin embargo, para sorpresa de la pareja, los demás pasajeros del avión organizaron un baby shower improvisado y empezaron a regalarles a los Moore un montón de tarjetas de felicitación dibujadas a mano en las servilletas, pequeños regalos y hasta dinero. Una de las servilletas decía lo siguiente:

"A mí me adoptaron hace 64 años. Gracias por darle a esa niña la oportunidad de tener una familia cariñosa. Los adoptados necesitamos un poco más de amor. Felicitaciones".

La voz de Dustin se quebró al recordar cómo le hicieron sentir todos esos buenos deseos:

"No esperábamos que hicieran algo así. Se me hace un nudo en la garganta al pensar en ello".

El personal del avión recogió todas las servilletas, e incluso leyeron algunas en voz alta. Los auxiliares de vuelo recogieron un total de 60 servilletas de los pasajeros y se las entregaron a los Moore.

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Dustin expresó su gratitud a través de Twitter:

"Lo que todos esos asistentes y desconocidos no sabían, era la sensibilidad emocional en que estaban esos dos flamantes padres. Unos padres que, tras nueve años de intentos, habían sido bendecidos con su primer hijo. Unos padres que estaban muy asustados, pero también muy decididos a cumplir a cabalidad con su nuevo papel".

Dustin le contó a The Washington Post que la pareja estaba ante un nuevo hito en sus vidas. Dijo:

"La adopción genera una gran incertidumbre. Nos preguntamos si la madre biológica realmente va a querer entregarnos a su hijo. ¿Qué pasa si luego cambia de opinión, si se echa para atrás?".

Los Moore decidieron adoptar a la bebé a través de una agencia, después de enfrentarse a un cuadro de infertilidad. La infertilidad afecta a entre el 10 y el 15% de la población, y presenta tasas crecientes a partir de los 30 años. Los hombres y las mujeres se ven afectados en proporciones aproximadamente iguales. Los tratamientos para combatir la infertilidad dependen de la causa que la origina, y pueden consistir en cirugías, tratamientos hormonales, inseminación artificial o fecundación in vitro. En algunos casos, las parejas recurren a la donación de esperma u óvulos. Sin embargo, los tratamientos contra la infertilidad suelen fracasar. En esos casos, las parejas que desean criar un hijo deben considerar la adopción.

Hoy en día hay millones de niños alrededor del mundo que guardan la esperanza de ser adoptados. En Estados Unidos, adoptar a un niño del sistema de acogida suele ser relativamente fácil y barato. El camino más fácil es ser aprobado como padre de acogida, lo que supone albergar y atender al niño durante un periodo de tiempo, para luego solicitar su adopción. En algunos estados, el proceso de solicitud de acogida puede costar menos de 100 dólares. Las parejas que insisten en adoptar a un recién nacido a través de una agencia de adopción privada suelen enfrentarse a muchos problemas adicionales, como las tasas elevadas y los prolongados periodos de espera, antes de que el recién nacido sea puesto en adopción. En promedio, la adopción privada de un bebé puede costar más de 40.000 dólares.

A pesar de las dificultades que tuvieron que pasar para poder formar su propia familia, los Moore recibieron la solidaridad y el apoyo del personal y los pasajeros de ese avión. Dustin dijo:

"Que toda una tripulación de desconocidos se reúna de esa manera, mostrándonos todo su amor y su amabilidad, significó un mundo para nosotros".

Cuando la pareja llegó a su destino (Buena Park, en el condado de Orange, California), Dustin se encargó de ponerse en contacto con Southwest Airlines para contarles sobre ese acto de bondad. La madre de Moore, ahora abuela de la recién nacida, hizo manualidades y formó un libro para guardar las servilletas. Así la pareja las podrá conservar y mostrárselas a su hija cuando sea grande.

Al principio, cuando Dustin entró en Twitter, no tenía la intención de compartir la historia de su vuelo. Moore es un nutricionista titulado y candidato a doctor en Salud Pública por la Universidad de California en Irvine. Se había metido en Twitter para quejarse del trabajo, pero cambió de opinión, según explicó a The Washington Post.

"Me dije: '¿Qué tal si destaco algo bueno? Estaba cansado de usar mi Twitter para hablar de cosas horribles. Quería aportar algo constructivo".

Moore continuó hablando de lo cautivados que están Caren y él con su bebita.

"Es increíble tener una hija. Todos los pequeños detalles que son mundanos para otras personas son increíbles para nosotros. Cuando eructa, pensamos: '¡Qué logro!'. Fue una larga, larga espera para ella, pero cada minuto que tuvimos que esperar valió la pena".

¿No te parece que este fue uno de los gestos más dulces que han tenido lugar a bordo de un avión? Cuéntanos lo que piensas, y si te ha encantado esta conmovedora historia sobre la amabilidad que pueden mostrar las personas desconocidas, asegúrate de compartirla con todos tus contactos.

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