Un soldado se preocupa de que un perro militar no lo reconozca después de 3 años, después ve al perro entrando por la puerta
Feb 26, 2019 by apost team
Por mucho tiempo se ha dicho que el perro es el mejor amigo del hombre y, para el especialista del ejército de los Estados Unidos Vance McFarland, esto fue especialmente cierto cuando fue desplegado a Afganistán.
Durante su tiempo detectando aparatos explosivos en el ejército, McFarland hizo equipo con un pastor bohemio llamado Ikar.
Los dos rápidamente se hicieron amigos y McFarland explicó que el tener un perro con él le recordaba su hogar.
Mientras los dos eran amigos cercanos, tuvieron que separarse cuando regresaron a Fort Bragg. Después de una rápida sesión de fotos, fueron separados.
Aunque Ikar fue mandado de vuelta a Afganistán, se hizo evidente que no había necesidad inmediata de sus servicios. En vez de ponerlo de regreso en acción, este valiente héroe fue obligado a quedarse en un refugio animal por un año. Aquí es donde la organización Mission K9 Rescue actúo para salvar el día.
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Kristen Maurer, quien trabaja como presidenta de la organización, estaba ansiosa por liberar a estos perros y brindarles el retiro que merecían.
Mission K9 Rescue se puso en contacto con Vince McFarland por medio de Facebook para saber si Ikar y él habían trabajado alguna vez juntos. Si bien McFarland probablemente había pensado mucho en su viejo amigo durante sus tres años de separación, no tenía idea de que Ikar había terminado en un refugio. Le rompió el corazón y aceptó abrirle las puertas de su casa a su viejo amigo.
La organización de rescate arregló el viaje de Ikar y de varios otros perros militares a los estados.
Esperando la llegada de Ikar, McFarland comenzó a ponerse nervioso y preocupado de que, aunque él había pensado mucho en su viejo amigo, Ikar quizá no lo recordaba.
Los temores de McFarland fueron en vano. Cuando Ikar es guiado en su dirección, McFarland grita su nombre y las orejas del perro se mueven de inmediato. Cuando ve a su viejo amigo de guerra, Ikar se suelta del hombre que lo lleva y corre a toda prisa hacia McFarland. El veterano del ejército se agacha y los dos comparten juntos un momento especial. Obviamente, los tres años lejos no rompieron este lazo especial.
Aunque McFarland y su esposa ya tienen dos perros, ahora están en proceso de adoptar a Ikar y agregarlo a su familia. Sabemos que Ikar va a recibir mucho amor y que los dos amigos de combate pueden disfrutar de una vida larga y feliz juntos.
¿Qué opinas de esta hermosa relación entre Ikar y McFarland? Cuéntanos, ¡y comparte esto con tus seres queridos!