Un niño pequeño mancha la alfombra de azul antes de morir; años después, su mamá comparte la conmovedora verdad

Oct 12, 2018 by apost team

Cuando eres una madre, usualmente puedes contar con que te toque hacer un millón de cosas al mismo tiempo. Probablemente sientes que tus hijos te molestan todo el día, que tienes que lavar montones de cargas de ropa y hacer comida durante horas (¡que apenas tocan!)

Hay muchos días en los que probablemente desearías simplemente poder encerrarte, incluso solo por unos minutos.

Heather Duckworth es una madre entregada que entiende los desafíos de la maternidad demasiado bien. No obstante, tiene una historia que contar que significa mucho para ella. Espera que al contar su historia, otras mamá encuentren felicidad en las diferentes situaciones desastrosas con las que de forma inevitable se encuentran a medida que sus hijos crecen.

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Una publicación de Facebook titulada "The Blue Stain" ("La mancha azul") estaba basada en una historia personal. Comenzó con el asqueroso montón del pegajoso slime que su hija por accidente había dejado caer en el piso. Mientras que lo limpiaba, recordó otra cosa.

Catorce años atrás, Heather estaba llevando a la cama su hijo de 4 años y a sus trillizos de 2 años. Toda su vida consistía en torbellinos de comidas, pañales, siestas, juguetes, baños, desastres y muchas otras cosas.

Heather hacía que los niños recogieran los juguetes antes de que se fueran a dormir. Estaban cantando y bailando mientras limpiaban, algo que ella les había recomendado hacer para que los deberes fueran más llevaderos.

Ahí fue cuando Heather vio la gran mancha azul en la alfombra.

Uno de sus trillizos tenía en sus manos un bolígrafo que había explotado. La tinta había caído sobre su pijama, su cuerpo y sobre la alfombra. De inmediato se molestó y se lo llevó al baño para intentar limpiarlo mientras su esposo intentaba limpiar la alfombra.

Admitió que estaba enojada, molesta y frustrada en el momento. Dice que no estaba molesta con su hijo porque hiciera el desastre. En cambio, estaba molesta consigo misma por dejar el bolígrafo donde el pequeño niño podía tomarlo. Dijo que su alfombra relativamente nueva ahora tenía una mancha azul que no saldría, no importaba con cuánta fuerza ella y su esposo la frotaran.

Apenas un mes después del accidente, a ese mismo niño le diagnosticaron cáncer. En solo dos cortos años ya había muerto.

Sin embargo, la mancha de tinta azul todavía estaba ahí.

Heather quiere recordarle a todo el mundo que sí, la vida puede ser desastrosa. La mancha azul la molestaba cada vez que caminaba encima de ella, pero sabe que en el gran panorama de las cosas esto no era importante.

La mancha nunca salió, incluso con limpieza profesional, y Heather dijo que le recuerda que está bien que los accidentes ocurran. Cuando la ve, respira profundamente para recordar el pequeño chico que perdió.

Heather quiere que todo el mundo recuerde que los desastres ocurren. No vale la pena molestarse por ellos, ya que hay asuntos mucho más importantes en la vida.

¿Qué piensas de esta hermosa historia?¡Esperamos que haya tocado tu corazón! Deja un comentario y compártela con los padres estresados que conozcas.