Tristes noticias sobre matrimonio de pareja con síndrome de Down que se amó de forma incondicional durante 25 años

Abr 29, 2019 by apost team

Kris y Paul Scharoun-DeForge vivieron una experiencia real del amor prohibido como Romeo y Julieta o, más bien, amor no convencional. Aunque su familia no evitó que estuvieran juntos, la sociedad en general normalmente ha visto a estas personas con síndrome de Down como seres incapaces de tener una relación romántica madura, mucho menos tener un matrimonio que dure más de dos décadas.

Estos dos rompen todo paradigma y demuestran que el amor no tiene límites.

El amor es más que una palabra. Va más allá de todo estado emocional. Pues sí, amor es un verbo. Es una fuerza. Impulsa a las personas a hacer cosas increíbles y a superar obstáculos inimaginables. Algo que es tan maravilloso sencillamente no se puede calificar, meter en una caja y colocar en un estante.

Nada puede demostrar mejor esto que la historia de amor de Kris y Paul Scharoun-DeForge, ambos diagnosticados con síndrome de Down desde pequeñitos. Los dos tortolitos se conocieron 30 años atrás en un baile. Fue una conexión y una atracción instantánea.

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Kris expresaría más adelante que Paul abrió su mundo y que vería su futuro en sus ojos esa crucial noche en el baile.

Cinco años después, en 1994, se casaron. Sería un matrimonio que duraría 25 años y es tal vez el matrimonio con mayor duración de una pareja con síndrome de Down. Con el paso de los años, la pareja se convirtió en figura cívica y trazó el camino para un cambio para las personas con discapacidades de desarrollo. Su historia de amor venció a todos los pronósticos. Le mostró al mundo que las personas con discapacidades pueden tener y sí tienen relaciones románticas significativas.

Paul estaba graduado de la preparatoria, tenía varios trabajos, dominó el uso del transporte público e incluso recibió el homenaje de ser la persona del año en el 2013 de parte de la organización ARC of Onondaga. Por desgracia, hacía poco había desarrollado alzheimer y un estado prematuro de demencia, que es una afección que comúnmente afecta a la comunidad con síndrome de Down a medida que envejecen. Con el apoyo de sus seres queridos, Kris le solicitó al Estado que les permitiera a Paul y a ella permanecer en su apartamento en Siracusa con personal de apoyo para lidiar con su enfermedad en etapa inicial. Eventualmente la salud de Paul se deterioró hasta el punto en el que la pareja se tuvo que separar.

Necesitaba el cuidado intensivo de enfermeros y fue trasladado a un centro asistencial residencial. Los dos solían verse con tanta frecuencia como fuera posible y aprovecharon al máximo lo que serían sus últimos meses juntos.

Kris se estaba recuperando de su propia batalla por su salud por una neumonía en el Upstate University Hospital en Siracusa cuando apareció Paul para celebrar su aniversario de boda número 25. A pesar de que ambos iban en sillas de ruedas, el dúo dinámico renovó sus votos en la capilla del hospital. Seis meses más tarde, los dos celebrarían el Día de San Valentín con una visita sorpresa de Harmony Katz. Kris puso amorosamente sus brazos sobre su esposo y disfrutó de la letra de canciones como "Let Me Call You Sweetheart". Sería su última celebración juntos. Kris dibujó una hermosa mariposa para colgarla en la cama de Paul. También le escribió una nota para decirle que era el hombre de sus sueños.

Con 56 años de edad, Paul moriría apenas unos meses después del Día de San Valentín por complicaciones de demencia y alzheimer. Kris tiene 59 años y es viuda. Sin embargo, su historia vivirá y permanecerá como una inspiración y como una base para el amor en todos lados.

¿Conoces a alguien con una historia de amor poco convencional? ¿O alguna vez has sido parte de una? Cuéntanos tu historia, tu opinión y tus preguntas en la sección de comentarios. No te olvides de compartir este relato para que pueda seguir brindando inspiración a otros y les muestre que el amor de hecho sí puede conquistarlo todo.