El novio canceló la boda a último momento, así que la madre de la novia invitó a 120 personas sin hogar a darse un banquete

Ene 27, 2023 by apost team

No importa si se trata de una boda fastuosa o de una boda sencilla. En cualquiera de los dos casos, los preparativos requieren una meticulosa atención, aunque tengamos un organizador profesional que se encargue de todo ese trabajo. Por lo tanto, no es de extrañar que la preparación de las bodas se tome varios meses.

Es angustiante pensar en los gastos que conlleva la boda, pero la idea de pasar el resto de tu vida con otra persona también puede hacer que cualquiera se ponga ansioso. Probablemente esa es una de las razones por las que no es raro que la gente cancele todo justo antes de casarse. Pero, ¿es justo echarse para atrás solo porque cambiaste de opinión? No lo es. Aparte de los miles de dólares gastados, hay serias consecuencias sobre los sentimientos de la otra persona.

En octubre de 2015, una pareja de Sacramento, California (Estados Unidos), se estaba preparando para la boda de su vida. Pero, por desgracia, el novio canceló la boda a último momento. La madre de la novia, Kari Duane, se sentía triste por lo que le había ocurrido a su hija, Quinn Duane, pero no quería que se desperdiciara toda la comida que habían preparado para los 120 invitados.

"Siento mucha pena y angustia por ella, pero tengo que sacar algo positivo de todo esto", le dijo Kari a KCRA.

Como ya habían hecho un pago inicial de 35.000 dólares por la boda, Kari decidió celebrar un festín para las personas sin hogar en la sala de banquetes del Hotel Citizen.

La madre de la novia explicó que tenía mucho sentido darles una retribución a las personas que se lo merecían. Al fin y al cabo, en la vida hay muchas cosas por las que agradecer.

"El lunes me enteré de que no iba a haber boda y me pareció que debíamos devolverle algo a la gente", señaló.

No te olvides de llegar al final de este artículo para que veas el video completo.

Kari recordó que la primera persona que llegó fue una mujer que vivía en un albergue, con personas que, o bien eran demasiado mayores para trabajar, o tenían dificultades económicas y no podían permitirse pagar el alquiler. La mujer llegó 30 minutos antes de la hora prevista. En ese momento, Kari sintió que no importaba que no asistiera nadie más. "En ese momento pensé: aunque esta sea la única persona que venga, todo habrá valido la pena", señaló Kari.

Para su sorpresa, otras personas acudieron al acto. Una de ellas fue Rasad Abdullah, quien se apareció con su mujer y sus cinco hijos. A diferencia de los días normales, en los que ni siquiera podían comer tres veces al día, ese día Abdullah y su familia se sintieron como si fueran de la realeza. Sencillamente, todo el recinto estaba rebosante de comida. Para Abdullah, fue una bendición vivir semejante festín, no solo para él, sino también para toda su familia.

"Cuando estás pasando por un momento tan difícil y tienes problemas para salir a hacer algo diferente con tu familia, este tipo de cosas son una bendición", reconoció el hombre.

Otra invitada, Erika Craycraft, alabó la generosidad de Quinn y de su familia, porque tuvieron la amabilidad de darles algo a otras personas a pesar de que ellos habían perdido mucho.

"Perder algo tan importante para ti, y dárselo a otra persona, es muy generoso, muy amable", señaló Craycraft.

Tamara Dotson, una madre sin hogar, dijo que aunque le gustaba la comida que le daban en el refugio, nunca hubiera podido comer los platillos que les sirvieron ese día. "Esto no sale de nuestra cocina. Adoramos a nuestro chef Leo, pero él no podría prepararnos algo como esto", señaló Dotson.

apost.com

¿Qué tienes que decir sobre la decisión que tomó esta madre de celebrar un banquete para los sin techo cuando la boda de su hija no salió como esperaba? Dinos lo que piensas y comparte esto con todos tus amigos y familiares.

Sigue bajando para que veas más historias