Bóxer "voltea" sus ojos cuando la mamá la recoge de la casa del vecino

Mar 28, 2020 by apost team

La relación entre los humanos y los animales es algo muy especial y, a veces, muy cómico. Cuando una perrita bóxer llamada Daisy May fue recogida por su dueño de la casa de un vecino, después de que ella se escapara para estar allí, la interacción que tuvo lugar fue algo divertidísimo. Sentada en el asiento trasero del coche, la perra recibió una severa amonestación, y su lenguaje corporal sugiere que sabe que es culpable.

El vídeo comienza con Daisy May recibiendo instrucciones para saltar al asiento trasero del vehículo. Al principio parece estar de buen humor, pero luego comienza el castigo e inmediatamente Daisy May parece saber que ha metido la pata. "Sabes que no deberías estar aquí, ¿verdad?", dice alguien en el asiento delantero, mientras graba la reacción de Daisy. Esta bóxer gira casi inmediatamente la cabeza para mirar por la ventana, como si estuviera ignorando el comentario, seguido de lo que parece un giro de ojos. La reacción es divertidísima y resume perfectamente lo que está pasando.

La mujer continúa: "Y vienes aquí todos los días. Esta no es tu casa". Daisy, mientras tanto, comienza a mirar hacia abajo en su asiento, y mira hacia cualquier otra dirección menos hacia la de la persona que le habla. La mujer se da cuenta de esto e intenta llamar a Daisy mientras esta intenta hacerse la loca: "Oye, esta no es tu casa", continúa la mujer.

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La otra mujer sentada en la parte delantera del auto añade: "Debes quedarte en casa con Mac, él es tu amigo". Daisy está obviamente alterada por el inquisitivo momento, mirando en todas las direcciones, arriba, abajo, a los lados, para evitar que la mujer severa continúe. La escena es casi como si Daisy fuera una adolescente que está siendo reprendida por romper las reglas, es muy divertido de ver.

"Se supone que debes estar en casa con Mac, lo dejas allí solo. Todo el tiempo, todos los días. Y luego tenemos que ir a buscarte cuando es hora de cenar. Daisy, te estoy hablando... ¿Por qué lo haces todos los días? Dejas a Mac solo, y luego te enfadas con nosotros cuando vamos a buscarte. ¿Por qué no te gusta quedarte en casa?", le dice a Daisy.

En ese momento, la perra empieza a hacer un sonido, como un suave quejido, como si estuviera harta de la discusión y solo quisiera que la dejaran en paz. La mujer sigue hablando con ella, diciendo: "¿En serio? Nos gusta cuando estás en casa. Te extrañamos... Solo di que lo sientes, di que lo sientes". Justo después de esto, cuando llegan a su destino, Daisy lanza un gemido más fuerte y exasperado, como si quisiera decir que lo siente de verdad.

Es un misterio por qué Daisy sigue yéndose a la casa del vecino todos los días, pero tal vez tiene un amigo allí al que tiene que ver... ¿O quizás incluso hay un perro del que está enamorada? ¡Quién sabe!

Los perros poseen características que los hacen muy diferentes de los humanos, particularmente su sentido del olfato. Mientras que los humanos tenemos tan solo seis millones de receptores olfativos en nuestras narices, los perros tienen hasta 300 millones. La parte del cerebro de los perros que se encarga del olfato es también muy diferente, y proporcionalmente, unas 40 veces más grande en los perros que en los humanos. ¿Quizás es algo relacionado con el increíble sentido del olfato de Daisy lo que lleva a volver repetidamente a la casa del vecino?

¿Qué te pareció el descaro de Daisy y su comportamiento? ¡Dínoslo en la sección de comentarios y asegúrate de compartir esto con tu familia y amigos o con todos aquellos que amen a los perros!