A los 61 años de edad se convirtió en madre subrogada, y dio a luz a su propio nieto
Nov 23, 2019 by apost team
La familia está para apoyarse en las buenas y en las malas. Sin esperar mucho a cambio, nuestros familiares nos ayudan en las situaciones más difíciles de la vida. No hay duda de que muchos padres harían cualquier cosa para ayudar a sus hijos. Pero hay una mujer de 61 años que superó todas las expectativas para poder hacer feliz a su hijo.
Esta mujer, llamada Cecile Eledge, se ofreció como madre subrogada de su querido hijo, Mathew, y del esposo de este, Elliot.
Como deseaban tanto tener un hijo propio, habían pasado algunos años haciendo las diligencias para empezar el tratamiento de fertilización in vitro. Pero se llevaron la sorpresa de su vida, porque la madre de Mathew se ofreció para ser el vientre de alquiler. Cecile tuvo una experiencia maravillosa con sus embarazos anteriores, y sentía que su cuerpo sería capaz de tener otro bebé.
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Sin embargo, la familia no estaba segura de que los médicos permitieran que la misma abuela del niño lo trajera al mundo. Cuando tuvieron la cita con un endocrinólogo reproductivo, quedaron encantados al saber que el médico les iba a ayudar en la tarea. El proceso comenzó, a pesar de que Cecile ya estaba en la menopausia. De hecho, ya habían pasado más de 30 años desde su último embarazo.
Antes de que se iniciara el embarazo, Cecile tuvo que someterse a algunos exámenes, como una prueba de papanicolaou, análisis de sangre, pruebas de colesterol, mamografías y ultrasonidos. Su salud tenía que estar en plena forma para poder traer a su nieto al mundo. Mientras se realizaban las pruebas, la hermana de Elliot decidió hacer su propia contribución: ¡ella fue quien aportó los óvulos!
Cuando Cecile pasó por todas las pruebas, comenzaron los tratamientos hormonales y los óvulos de la hermana de Elliot fueron fertilizados con el esperma de Mathew. A pesar de los retos a los que se enfrentaba, Cecile quedó embarazada en su primer intento de implantación. El embarazo no fue fácil debido a su edad, pero lo supo manejar con mucha entereza.
Sufrió las náuseas matutinas y los picos de presión arterial, pero a pesar de todas las probabilidades en contra, finalmente la niña nació y le pusieron el nombre de Uma. ¡La bebé nació sin necesidad de hacer cesárea! Naturalmente, los padres del niño se sintieron muy emocionados durante todo el proceso del parto, y sus lágrimas fluyeron a raudales.
"No sé cómo describirla; es extraordinaria. Tengo un respeto muy profundo por ella y me siento muy agradecido con ella, porque a pesar de la edad que tiene, sigue dándolo todo por mí", le dijo Matthew, de 32 años de edad, al Daily Mail.
Matthew no podía creer que su madre hubiese hecho todo eso para hacerlo feliz y ayudarlo a formar una familia. También le da las gracias a su madre por haberlo convertido en la persona que es hoy. Dice que es una mujer fuerte e increíble, toda una guerrera.
Cuando se le preguntó sobre el proceso de parto, Cecile le dijo al Daily Mail que no le resultó difícil entregarle el bebé a su hijo. Ella siempre sintió que el bebé era su nieto, y el embarazo la había dejado tan agotada que estuvo feliz de entregárselo a sus amorosos padres.
¿Qué piensas de esta historia? ¿Te ofrecerías a ayudar a alguien de tu familia de esta forma? Déjanos tu opinión en los comentarios, y no olvides de correr la voz sobre este embarazo tan especial.